Calendario de Marketing: oportunidad VS cantidad

Ahora llega Halloween y seguro que ya has visto más de un escaparate adornado convenientemente. En el caso del marketing online, también habrás visto campañas o post relacionados con Halloween. Estoy convencida de que te preguntarás, ¿tengo que estar pendiente de todas estas fechas? Pues como todo, no hay una respuesta clara, aunque para algunos casos, sí que hay un acuerdo.

Planificar acciones: cómo aprovechar mejor tus posts

Días y fechas institucionalizados

Si se trata de Halloween, Navidad, Semana Santa… en todos estos días que forman parte de nuestra cultura, tienes que estar. Google te querrá más si te unes a conversaciones que se están dando en todo el mundo o en todas España. Por eso, es importante vincular nuestra marca a esas festividades. Puedes hacerlo así:

  • Escribiendo en tu blog un post que relacione tu producto o servicio con la fecha señala
  • Enlazando a tus redes sociales un video, un podcast, o post donde se hable del tema usando un hashtag (ya hablaremos de cómo enlazar en las distintas redes sociales) 
  • Escribiendo un post directamente en las redes sociales usando el hashtag de la celebración, acompañado de una foto, un vídeo o un gif

Si quieres tener feedback, es decir, “me gusta” (likes) o comentarios, lo ideal es que seas original y que incluyas alguna pregunta. El sentido del humor y los dobles sentido gustan mucho, pero piensa mucho en tu público y en qué tipo de mensajes le gusta recibir

Marketing on line: Qué pasa con los días de

Si miras un calendario como este, encontarás en él una herramienta muy útil, pero, ojo, que exista un “día de” no significa que tengas que unirte a todos. Piensa primero en aquellos que tienen relación con tu producto y después aquellos que pueden emocionar a tu público objetivo o a tus clientes, porque, seguramente, estén usando ese hashtag. De esa manera, al usarlo tú, estás yendo hacia ellos y podrás establecer contacto. Te recordarán o se enterarán de que existes. Servirá para iniciar o fortalecer vuestra relación. 

Los días de ayudan a personalizar

Mi lema es “lo digital es personal”. Todo lo que hagamos nos tiene que llevar a la palabra “persona”. Cuando hablas, hablas con la gente y si hablas de aquello que le interesa o que le emociona, haces que te empiece a querer un poquito. Tu marca, tú, eres un ser querido. Por tanto, a la hora de pagar por un producto o un servicio, se decidirán por sus seres queridos y con los que comparten valores.

Presencia online en las fiestas locales

Muchas fiestas locales no salen en los calendarios, pero son importantes en la zona en la que trabajas. Ve a por ellas con un hashtag y trátalas con el mismo rigor que si fuera una Día internacional de algo. Si tu público es tu vecino, tendrá mucho más en cuenta esta decisión que cuando te sumas a las fechas típicas a las que todo el mundo se apunta. Además, si eres tú el creador del hashtag, serás generador de conversación. Darás a Google razones para tenerte un cariño especial, porque todos los caminos llevarán a ti y eso hará que subas unas cuantas posiciones en las páginas de búsqueda.

Para planificar de manera original y eficaz, te recomiendo que lo hagas con un mes de antelación. Si dedicas unas cuantas horas o un día a ello, ahorrarás mucho tiempo después y, lo que es más importante, entrarás en contacto con tu público de una manera eficaz y personal. No serás uno más. 

Marketing para pequeñas empresas: la importancia de estar y de saber estar

Como clienta, intento apostar siempre por el comercio de cercanía, sobre todo cuando se trata de comprar o probar algo de lo que no sé mucho. Me gusta optar por los negocios offline, porque las personas que están detrás del mostrador, la barra… pueden aconsejarme. Sin embargo, muchas veces no tengo el tiempo que necesitaría para conversar, así que decido buscar el negocio en Facebook o Twitter y, ¿qué suele suceder? No obtengo respuesta o que, cuando la obtengo, es demasiado tarde. Incluso, a veces, es posible que intente hacer hueco para poder desplazarme y que tampoco la experiencia sea satisfactoria, ¿por qué? Porque la persona empleada no sabe lo que está vendiendo y, por tanto, no puede aconsejarme. Teniendo esto en cuenta, quiero hablaros de la atención al cliente, pero os voy a hablar de dos tiempos de clientes: el cliente externo y el cliente externo, ¿empezamos?

Marketing en pequeñas empresas: céntrate en el cliente

Cuida al cliente externo: el cliente que se acerca a tu local

Cuando hablamos de marketing online, debemos recordar algo: estamos en Google o en Facebook para estar disponibles. Si abrimos una cuenta en Google o en redes sociales y no atendemos a las personas que se ponen en contacto con nosotros, es como tener nuestro local permanentemente cerrado, ¿qué pensarías de un negocio que solo abre las persianas cuando tiene ganas? ¿de un hotel sin recepcionista o que aparece solo cuando quiere? ¿y de un restaurante o bar cuyos cocineros solo y camareros dependen del resultado del fútbol para ponerse a trabajar? La sensación de dejadez y de falta de profesionalidad que tendrías sería letal para estas empresas. Esto mismo sucede cuando escribes a una red social de una empresa y no te contestan.

Ten en cuenta que, si ya ha llegado hasta ti entre toda la competencia, ya tienes mucho terreno ganado. Terreno que perderás a favor de otro negocio similiar o de Amazon, en el mismo instante en el que ignoras a tus posibles clientes o, simplemente, decides no abrir ese día Facebook. Además, asociará a tu marca o a tu nombre emociones como decepción y rechazo. Por tanto, si estás, tienes que saber estar y saber estar significa contestar, aunque sea para disculparte por no tener ese producto o servicio que busca. Quizá no consigas una venta, pero pensará en ti como un negocio honesto. 

Además, también deberías intentar ser tú quien genera las conversaciones en la red, pero esto lo dejaremos para el siguiente post, en el que hablaremos también de SEO, ¿te suena? ¿has escuchado hablar de él?

Clientes internos: tu persona empleada o tu plantilla

Cuando hablamos de cliente interno, nos referimos a las personas que trabajan para tu empresa. Ellas también son tus clientes porque esperan algo de ti: un salario proporcional al trabajo, respeto, que los escuches y ¿Formación? Es cierto que todo el mundo busca en sus jefes esa buena relación y ese buen salario, pero también lo es que la curiosidad es una cualidad que no siempre abundan. Las personas curiosas hacen muchas preguntas, quizá te abrumen, pero, a medio plazo, satisfacer su curiosidad aumentará los beneficios de tu negocio, ¿por qué? Porque sabrán conversar conmigo y resolver mis inquietudes. Una persona formada, que sepa lo que está vendiendo es una mejor garantía que otra que acepta cobrar menos, pero que no muestra interés por aprender.

Cuando te llegue un currículum y hagas una entrevista, recuerda que la curiosidad y las ganas de aprender son tan importante como dar el cambio de forma correcta o llevar muchas copas en una bandeja. No hay un ciclo de formación en curiosidad, pero alguien con interés por aprender, habrá trabajado mejor su currículo, tendrá buenas habilidades comunicativas, se habrá preparado la entrevista y, además, en la primera semana de trabajo se comportará como una esponja, sin dudar en hacer las preguntas. Si se las respondes y fomentas este comportamiento, tu plantilla podrá ofrecer esas respuestas a tus clientes, de forma que cuando yo, que no tengo ni idea de pescado, tornillos o de cómo se paga las consumiciones en un hotel… obtendré rápidamente las respuestas que necesito y si no compro ese día, compraré al día siguiente.

Estar abiertos o tener redes sociales no basta. Tienes que estar disponible, para que quienes se acerquen a ti, te escojan. Si tu manera de estar en redes y fuera de ellas es más distante que el de una gran empresa, elegirán la gran empresa. No necesitas grandes recursos: solo atención, dedicación y conocimiento, tanto por tu parte como de parte de tu plantilla

Marketing online para PYMES: lo digital es personal

La competencia de un comercio tradicional no es la tienda que tiene al lado. La competencia real es Amazon, Glovo y centros comerciales como el Nevada o el Ingenio. Competir con esos gigantes solo es posible de una manera: destacar a la gente. Nosotros somos personas, vecinos, y no máquinas o personas a sueldo que siguen las reglas de una franquicia. Nuestra tienda, bar, peluquería, hotel o restaurante… no puede encontrarse en ningún otro lugar, porque tú eres tu negocio. Y esto es lo que tienes que potenciar en tus redes sociales, página web o blog.

PYMES y marketing onnline: 3 reglas para posicionar tu negocio en internet

Crear un blog: un artículo a la semana

Si no tienes página web, puedes crear un blog en plataformas como WordPress. Puedes optar por la alternativa gratuita o elegir otros planes de pago que se adapten a tus necesidades. Os recomiendo elegir, al menos, el Premium, para que podáis personalizar vuestra url, es decir, para introducir el nombre de vuestro negocio en la dirección de vuestro blog

Qué contenido comparto en el blog

Es una de las preguntas más interesantes. El contenido, los artículos que escribas tienen que estar relacionados con el área de trabajo de tu empresa, pero, al mismo tiempo, lo ideal es evitar hacer ofertas directamente. Piensa en qué intereses tienen tus clientes respecto a tu área de trabajo y escribe sobre ellos. De esta manera, te considerarán una persona de referencia a la que acudir cuando tengan dudas

Redes sociales: comunícate con tu vecino

Me he criado en negocio familiar en Almuñécar. Familiar porque todos echábamos una mano y familiar, porque a pesar de que nuestra tienda tenía un nombre, una marca, la gente del pueblo la conocía por la tienda de mi madre y mi padre. Gracias a las redes sociales, puedes conseguir esa cercanía. Aumentas tu presencia en la comunidad, eres parte de ella y, por tanto, eres un vecino: alguien a quien merece la pena ayudar. Nadie tiene aprecio a Amazon, esa relación de cariño solo se establece entre personas y cuando lo consigues, la gente prefiere caminar e ir a tu local, antes que elegir una tienda online impersonal

Qué redes sociales elijo para mi negocio

Seguro que esto lo tienes claro: Facebook e Instagram. Facebook es la red por excelencia para crear comunidades, de hecho, esto se ha intensificado con la creación de los grupos de Facebook. De nuevo, te recomiendo que tampoco lo uses para la venta directa, sino para charlar con tus clientes o posibles clientes de aquello que tenéis en común. Evidentemente, si tenéis una oferta especial podéis hacerlo, pero no puede ser la norma. Por cierto, no os creéis un perfil personal, mejor una página, ya que están pensadas para las empresas y te ofrecerán funcionalidades muy útiles

Por su parte, Instagram te ayudará a familiarizar a la gente con la imagen física de tu negocio. Pueden conocerlo de pe a pa antes de haber puesto un pie en el mismo. Puedes aprovechar las stories para anunciar tus ofertas especiales, ahí sí, o para describir ese producto o servicio que quieres destacar ese día o esa semana, así como mostrar un caso de éxito

Geolocalización y hashtag: di siempre dónde estás y únete a otros

Cuando buscamos un restaurante en internet, hacemos búsquedas geolocalizadas: escribimos en google “restaurantes con buen pescado en Salobreña”. De lo contrario, si escribiéramos “restaurantes con buen pescado”, Google nos podría llevar a Málaga, Madrid o México DF. Por eso, todo lo que escribas tiene que estar geolocalizado. Si a esto le añadimos de 5 a 15 hashtag, nos pondremos en el campo de visión de las comunidades relacionadas con nuestro negocio. Por ejemplo #bricolaje,  #foodies, #restauranteparafoodies, #hotelesconpiscinaenalmuñécar… incluye alguno que tenga tu propia marca #angelasaragoncommunitymanager y añádelo siempre a tus publicaciones

Estas serían las tres reglas para empezar a posicionar tu empresa en internet, pero detrás de la técnica, siempre hay la misma regla de oro: personaliza la empresa, forma parte de la comunidad y ofrece honestidad. Poco a poco, iremos añadiendo más, para ir perfeccionando tu estrategia, pero si tienes alguna pregunta, no dudes en preguntarme.